Situada en Monção, a orillas del río Miño —frontera natural e histórica con Salvaterra de Miño, en Galicia—, la Quinta de Santiago es una finca centenaria con una fuerte tradición familiar. Esta continuidad en el tiempo, unida a un dinamismo abiertamente contemporáneo, la convierte en una de las fincas más emblemáticas de la subregión de Monção y Melgaço, territorio vitivinícola donde la expresiva y versátil variedad Alvarinho desempeña un papel fundamental.

En Quinta de Santiago, los lazos generacionales han consolidado una identidad basada en la tradición y la permanencia, pero siempre en diálogo con la curiosidad, la experimentación y la innovación. El pasado no es aquí un peso, sino un fundamento sobre el que se construye el presente.

Otra característica distintiva es el destacado papel que han desempeñado las figuras femeninas, tanto ayer como hoy, con Maria de Lima Santiago como principal referencia: matriarca, símbolo y fuerza impulsora inicial de un legado que sigue vivo y activo.

La finca está abierta a visitas, con cita previa, y ofrece una experiencia que va mucho más allá de la cata de vinos. Es una oportunidad para conocer los vinos Santiago, los procesos de vinificación, los viñedos y el entorno natural, el magnífico huerto, el perfumado jardín, la antigua bodega-museo y la pequeña capilla. Todo ello acompañado de una cálida bienvenida, cercana y profundamente apasionada por el lugar y por lo que en él se hace.