La marca Dona Paterna, creada en 1990, se entrelaza con el carácter emprendedor de Carlos Codesso, uno de los pioneros en plantar viñedos continuos de la variedad Alvarinho en Melgaço.
El nombre está intrínsecamente asociado a la Quinta da Carvalheira, situada en la parroquia de Paderne, con una vista privilegiada del valle del río Miño.
Cerca hay un monasterio muy antiguo, que es monumento nacional. Se dice que fue fundada por doña Paterna en el siglo X, casada con Hermenegildo, gobernador de Tui (Galicia). Y como te habrás dado cuenta, de ahí sacó esta marca de vino la inspiración para su nombre.
Los vinos se producen en una superficie de 17,5 hectáreas, en suelos graníticos, en pendientes suaves y medias pendientes, orientadas al sur, para que las viñas puedan aprovechar al máximo la exposición al sol.
Así, en este contexto, unido a las características climáticas de la región (elevada pluviosidad, humedad atmosférica, temperaturas suaves y pequeñas variaciones térmicas), nacieron los productos D. Paterna, que se dividen en tres variantes: vinos, aguardientes y vinos espumosos.
Un lugar para visitar, un productor experimentado y apasionado que merece la pena conocer.